En una siesta temblorosa
la brisa del norte
anuncia al sopor su derrota
Un barco amanece en tu lomo,
un pájaro picotea tu espalda,
las noches despiertan tu alma
Dibujé un verso en el río
me lo dictaba la ribera,
en el mar lo he visto crecido.
La moneda en el aire
se resiste a caer
y revelar mi destino
La felicidad
que nace del odio
dura lo que el flash
de una fotografía.
El efecto dominó
es imparable,
espero ser la ficha final.
Para leer a León Felipe
hay que viajar a México
para poder gritarle a España
o a lo que queda de ella
Dejarse caer sobre la cama
dormirse al compás de un grillo
Mirarse en los espejos, el alma.
De este material son mis amigos.
Un unicornio anda suelto
¡Cuidado! el cree que es rinoceronte,
no sabe que escapó de un sueño
Adolfo Lisabesky
No hay comentarios:
Publicar un comentario